24. Úbeda electoral
Ya estoy de vuelta por estos lares, vamos, en casa con mis papis que es donde mejor se está. Después de haber pasado un fin de semana de lo más entretenido paseando por pueblos con historia en cada uno de sus muros y calles, he decidido volver al presente, dejar atrás el pasado y disfrutar de lo vivido en mi memoria.
Podía contar muchas cosas del viaje, pero creo que eso ya lo haré en imágenes, que alguna foto para enseñar he hecho, pero el caso es que voy a contar algo que estamos viviendo aquí, allí y en el resto de España, la elecciones municipales.
El otro día entre la confianza de unos y la Murcia en crecimiento de otros, según quién nos de las perras, me quedé un poco liado con todo este tema, todavía no tengo claro a quién votar, pero después de haber estado en Úbeda y conocer al partido que han creado en Andalucía para estas elecciones, pero que sólo se presentan en algunos sitios, estoy totalmente alucinado, y no porque sea bueno o malo, sino por la campaña que están llevando.
Vas andando por la ciudad y te encuentras carteles como el de la foto (pincha sobre ella, y se abrrirá en grande), yo al principio pensaba que alguien se había muerto en el pueblo, pero cuando te fijabas bien y leías, ¡alucinabas!, esto si que es originalidad.
Las elecciones serán el día del fallecimiento de la política actual, mira que veo difícil eso, pero no me digáis que no es original. Pero ya cuando me pongo a ver el nacimiento tan ilustrativo de ese niño, para decirme que el partido SAIN comienza cuando muere otro, ¡joder! no me digáis que no son un poco raros estos tíos.
La otra tarde en mitad de la plaza, que es Patrimonio de la Humanidad en Úbeda, estaban representando una obra de teatro para niños, pero menudos mensajes subliminales..., iba sobre la solidaridad, educación y sobre todo sobre los usureros y ladrones de los políticos actuales, ya me imagino la casa de esos niños esa noche, ¿Zp era el malo de la obra, verdad? ¿el lobo, por qué tenía cara de Rajoy?
Pero ¿en qué mundo vivimos?, haciendo política con los niños, sin pensar que ya tendrán tiempo de comerse la cabeza cuando sean adultos, así luego salen como los de Jarrai, zumbados perdidos que no saben ni por qué hacen las cosas, sólo por lo que les han metido en la cabeza desde pequeños.
El caso es que en Úbeda aparte de Iglesias, palacios y buena tapas, hay publicistas electorales imaginativos, aunque sean demasiado explícitos en sus ilustraciones, que no sé yo cuantos votos podrán ganar.
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